Se ocupa la escuela. Algunos quieren quedarse a dormir.

Velando. La noche antes.

A las cinco y diez de la mañana.

Desayunando.

Esperando a que llegue la hora de abrir.

Esperando para votar.

Protegiendo el centro.

Se resistirá hasta el recuento.

La conexión llega desde casa de un vecino.

La gente grita "No tengo miedo"